Lo normal es que tengas un sitio donde dejar todo aquello que te quitas o llevas en las manos nada más entrar por la puerta de casa y lo último que coges antes de salir.

Un armario en el recibidor y una consola para dejar llaves y correspondencia es lo que todos solemos tener en este espacio de la casa.

Decide qué vas a guardar en estos muebles y sigue tu decisión a rajatabla.

Mantener el orden es importante para tener una sensación agradable. 

2. ¿Salón, cuarto de juegos, despacho?

El salón suele ser la habitación más grande de la casa y la que suele tener más usos.

Ésto hace que la llenemos de muebles y objetos que si no nos andamos con ojo, harán de este lugar de la casa uno de los más desordenados.

Intenta buscar a cada objeto su lugar adecuado, y cuando acabes de usarlo, devolverlo al lugar que le has asignado.

Así no dejarás nada por medio y tu salón será una apacible sala donde relajarse.

3. ¿Te gusta cocinar?

Entonces, pontelo fácil y no llenes la superficies de utensilios y pequeños electrodomésticos que no usas a diario.

No sólo tendrás más superficie para cocinar, sino que al despejar la encimera la cocina parecerá más organizada.

Utiliza botes para guardar los productos que van empaquetados, para conservarlos una vez que los hayas abierto.

En tu despensa, pon debajo los productos que más pesan. A la altura de la vista, los productos que más usas y delante, los productos próximos a caducar. 

4. Habitaciones en Orden

Una silla, una cómoda o simplemente encima de la cama, es muy tentador dejar la ropa cuando te cambias al llegar a casa o el pijama cuando te vistes.

Sé disciplinada y nada más te quites la ropa, vuelvela a dejar donde la cogiste.

Si está sucia, llévala al cubo de la ropa sucia.

Los papeles, monedas y demás objetos que sacas de tus bolsillos, tampoco los dejes por ahí encima. Tíralos o búscales un sitio donde guardarlos.

5. El Despacho es para Trabajar

No es un trastero improvisado donde dejas todo lo que no sabes dónde poner.

Si despejas tu mesa de trabajo de cosas innecesarias, te será más fácil concentrarte y rendirás más.

Usa archivadores, carpetas, bandejas, para mantener todo lo que necesitas para trabajar organizado.

Y si los cables te molestan, mantenlos a raya escondiéndolos o simplemente agrupándolos y conduciéndolos juntos usando pinzas para papeles. 

6. Relájate en el Baño

Si está desordenado, la ropa sucia tirada, los frascos por ahí diseminados, va a ser difícil que te relajes.

Ponte manos a la obra, usa cestas, cajas, organizadores de cosméticos para tener todo organizado.

Verás qué cambio. 

Ahora sí que podrás disfrutar de un baño relajante que te cargue las pilas.

TU TURNO: ¿Qué estancia de la casa te cuesta más mantener ordenada?